Un enlace con código malicioso enviado desde el exterior a un empleado pudo ser lo que encendiera las alarmas en Facebook, la mayor red social del mundo, cuyo goloso interés por parte de los «hackers» se va multiplicando. La compañía reconoció este sábado que había recibido un «sofisticado ataque» durante el mes de enero por grupos anónimos de «hackers», una situación que está siendo investigada por el FBI.
Este ataque no comprometió los datos de los usuarios de la red social. Las autoridades tratan de terminar el origen de este ataque «hacker», que afectó a ordenadores de algunos trabajadores de la compañía californiana. Esa sofisticación viene, más que nada, por la novedad del ataque. «Es el típico ataque de los miles que se descubren a diario, la diferencia es que normalmente se utilizan agujeros de seguridad ya conocidos para poder colarse en los ordenadores», explica para este diario Luis Corrons, director técnico de Panda Labs.