Los investigadores ahora pueden hacer que un gato y un pez de desaparezcan de la vista de todos, siempre y cuando se mire desde el ángulo correcto. El viernes pasado una de las primeras a gran escala “capas de invisibilidad”, dispositivos que pueden ocultar objetos del ojo humano fue presentado por un grupo de físicos de la Universidad de Zhejiang en China, la Universidad Tecnológica Nanyang en Singapur y las instituciones de Boston y el Reino Unido. El equipo construyó dos dispositivos diferentes, un recipiente rectangular y un recipiente hexagonal, y cada uno puede ocultar los elementos de los espectadores que buscan directamente en cualquiera de sus lados.
Ambos recipientes están hechos de un vidrio delgado que la luz se curva desde un lado plano a la otra, haciendo que aparezcan translúcidos. Mientras que la solución puede parecer simple, los investigadores tuvieron que volver a analizar los aspectos de un modelo anterior de cómo se podrían hacer capas.
La luz cambia, pero no se puede ver.
De este modo el equipo reconoció un elemento de diseño que no se necesitaba a gran escala, las capas anteriores trataron de mantener toda la luz que pasa a través de ellos en perfecto estado, pero para una capa más grande, los investigadores determinaron no tener que hacer eso. Algunas pequeñas diferencias pueden ser notables entre la capa de invisibilidad y el mundo real, pero los físicos sostienen que los seres humanos no deben ser capaces de distinguir los pequeños cambios. En este momento, el nuevo dispositivo de invisibilidad no es completamente oculto todavía. Sus costuras son todavía visibles debido al pegamento seco con que se pegan los vidrios y el equipo de investigación no ha comentado de si se puede ampliar fácilmente para ocultar objetos en más ángulos. Pero aún así, el equipo cree que su trabajo puede servir más que un truco de salón elaborado, en su forma actual podría aplicarse a los dispositivos de seguridad y vigilancia, siempre y cuando el ángulo sea el correcto.
