Nokia, el que fuera líder indiscutible de la telefonía móvil en la pasada década, iba a comenzar a utilizar Android como sistema operativo en algunos de sus terminales, concretamente en su línea X, que hace poco presentó su segundo modelo. Pese a que se trataba de terminales de gama baja y con una capa del SO de Google muy modificada, sin duda era un paso importante y se esperaba que el comienzo de algo interesante. Sin embargo las ilusiones se han esfumado: Nokia no volverá a incorporar Android.
Microsoft, que compró hace unos meses la división de telefonía de la multinacional finlandesa, ha anunciado que una de las medidas tomadas en la importante reestructuración que va a llevar a cabo es el integrar todos los dispositivos y servicios de Nokia en la compañía. Es decir, el gigante de Redmond ha decidido apostar exclusivamente, lo que por otra parte tiene mucha lógica, por su propio sistema operativo: Windows Phone.
Centrar esfuerzos
En un comunicado de prensa, Satya Nadella, el nuevo CEO de Microsoft ha explicado los motivos de esta decisión. El objetivo es «centrar todos los esfuerzos en conseguir innovar ofreciendo de esta forma la mejor experiencia de uso posible en Windows Phone». De esta forma es evolucionar los diseños de productos Nokia X para adaptarlos a la gama Lumia.
Continuarán dándoles soporte
Asimismo, desde Microsoft se ha querido tranquilizar a los usuarios actuales de Nokia X explicando qué pasará con los modelos actuales, dejando claro que se les continuará dando soporte e incluso vendiéndolos hasta agotar existencias.
