De acuerdo con una orden desclasificada del Tribunal de Vigilancia de Inteligencia Extranjera, a partir de 2011, la Agencia Nacional de Seguridad de EE.UU. fue “adquiriendo” más de 250 millones de “comunicaciones por internet” cada año conforme a la Sección 702 de la Ley de Enmiendas de la FISA (FAA) – el estatuto que permite a la NSA para recoger el contenido de las comunicaciones de Internet. La orden establece que la “gran mayoría” de estas comunicaciones se han obtenido de los proveedores de servicios de Internet bajo el uso del programa PRISM, y que sólo el 9% del total de las comunicaciones de Internet adquiridos por la NSA eran parte de sus prácticas de “upstream” de recogida, que tiran de los datos directamente de los cables de telecomunicaciones.
PRISM, una herramienta utilizada por la NSA para recopilar datos electrónicos privados de los usuarios de servicios como Gmail, Facebook, Outlook y otros, ganó relevancia internacional de este año después de la presentación de diapositivas de anuncios detallando los aspectos del programa fueron filtrados por un ex contratista de la NSA. El gobierno de EE.UU. ha insistido en que la NSA sólo se permite recoger información de inteligencia sobre ciudadanos no estadounidenses en el extranjero, pero los críticos del programa dicen que los esfuerzos de recolección del gobierno amplios, anuncios capturar datos demasiado “incidentales” que pertenecen a estadounidenses inocentes sin ninguna conexión con el terrorismo.
La orden de la corte FISA 2011 está dispuesto a ser desclasificados hoy tras una solicitud FOIA de la Electronic Frontier Foundation, y se difundió originalmente por el diario The Washington Post.
Mientras que las fugas anteriores sobre el programa PRISM insinuaban el alcance de la recopilación de datos, la orden judicial desclasificado hoy ofrece una mejor visión de la serie de comunicaciones discretas que son capturados. En junio, las diapositivas filtradas proporcionadas a The Washington Post por Edward Snowden PRISM revelaron que contenía más de 100 mil “objetivos de vigilancia activa”, con más de 100.000 “registros” -, pero el alcance completo de PRISM ha sido en gran parte un misterio.
